Pino abanderado en el Parque Natural Sierra de Baza con Sierra Nevada al fondo.
Muy especial ha sido este año 2009 para el Parque Natural Sierra de Baza en el que se celebraba el 20 aniversario de la de la declaración de la Sierra de Baza, junto a otros espacios naturales de Andalucía, como espacio protegido, por Ley 2/1989 de 18 de julio, por la que se aprobaba el Inventario de Espacios Protegidos de Andalucía. Una normativa legal que no solo pretendía la protección estricta, y como tal, de este territorio, sino que se creó con el doble objetivo de conservar la naturaleza, pero al mismo tiempo mejorar el bienestar de la sociedad, aspirando a convertirse en agentes activos del desarrollo socioeconómico, para lo que se pretendía compatibilidad su conservación con el aprovechamiento sostenible de sus recursos. PROYECTO SIERRA DE BAZA no ha querido permanecer ajena a esta efeméride y ha contribuido activamente en la celebración de actos conmemorativos del XX Aniversario de la Declaración del Parque Natural Sierra de Baza Espacio Protegidos, dentro de los que se han a incluido la presentación pública del Sendero de los Álamos Centenarios, el pasado 24 de mayo en una concurrida jornada, dando a conocer el sendero que se acondicionó recientemente para su uso y visita pública; como hemos llevado a cabo la edición de un DVD del Parque Natural Sierra de Baza del que ha sido director de la publicación Andrés García-Granados López de Hierro, con el título de "Lugares del Interés del Parque Natural Sierra de Baza", habiendo incluido una selección de imágenes de participantes en los X y XI Safari Fotográficos Parque Natural Sierra de Baza, con el fin de destacar su trabajo y contribuir a la difusión de sus imágenes.
Lo más negativo
En el aspecto de las sombras destacar como no ha sido ajeno nuestro territorio a la globalizadora crisis económica que ha invadido los más diferentes estamentos y sectores de la producción, también la vida de tantas personas y familias, y se han resentido las inversiones, particularmente las privadas, en este territorio que no termina de despegar económicamente.
La climatología ha sido muy variada y fluctuante, así si se comenzó el año con abundantes nieves, que permitieron recuperar muchas de las fuentes y manantiales que se secaron en el verano del año 2008, uno de los más secos que hemos vivido, pero si la primavera comenzó con mucha lluvia, a mediado de esta estación cambió el panorama y comenzó un período de sequía que se prolongo durante todo el verano y gran parte del otoño, hasta que a final de esta estación aparecieron las lluvias y hemos asistido a uno de los otoños más lluviosos de los últimos años, tendencia que ha continuado en los primeros días del invierno, lo que ha permitido recuperar acuíferos y el volumen de agua embalsada en los pantanos de la zona y enderar un año que marchaba por malos caminos climatológicos para nuestra Sierra.
Los efectos del cambio climático han continuado manifestándose en nuestra Sierra, con más virulencia de lo que podría esperarse, y se ha manifestado de forma apreciable en la fenología de las especies animales: así hemos comprobado como este año las aves subieron su habitual cota altitudinal de anidamiento, posiblemente en busca de temperaturas más bajas, conscientes del tórrido verano que les esperaba y que podía poner en riesgo de supervivencia las nidadas, o como las procesiones de enterramiento de la procesionaria del pino adelantaron su ciclo biológico de enterramiento, habiendo podido verse procesiones de enterramiento en la Sierra de Baza en los meses de noviembre y primeros días de diciembre, cuando este fenómeno comenzaba a producirse a partir de la segunda quincena de enero, como mínimo.
Este año se ha sufrido el más importante incendio forestal de los últimos años, el 2 de septiembre en las inmediaciones de la aldea de Bailén, en la cuenca del arroyo Balax, aunque afortunadamente sin mayores consecuencias por la efectiva intervención de todos los medios que contribuyeron en su extinción, aunque ardieron unas 100 has. de bosque de ribera y matorral-espinal fundamentalmente aznachal.
La grave plaga producida por la oruga de la procesionaria del pino, que afectó a unas 15.000 has. y de ellas, de modo muy importante, a más de 5.000 has. ha sido otra de las noticias negativas del pasado año 2009, y de la que también nos ocupamos de forma destacada en las noticias de este mes.
El año se ha cerrado sin que se conozca el autor o autores de la muerte por envenamiento de dos águilas reales en la zona de Beneroso en marzo de 2008, un tema en que no ha existido la necesaria transparencia ni información.
Lo más positivo
Dentro de los logros, destacar como se ha continuado con la recuperación de la masa forestal, continuando con la entresaca de la masa de pinar de reforestación, que presenta una densidad altísima, de hasta 3.000 pies/ha. cuando la superficie óptima para cumplir un monte unas funciones ecológicas y de biodiversidad idóneas se estiman en 500 - 800 pies/ha., y ello con la idea de ir dando cabida a otras especies climácicas más idóneas, particularmente encinas, recuperando la vegetación tradicional del monte mediterráneo que no es propia. También se ha mejorado importantemente la infraestructura de la red de caminos y pistas forestales del Parque, en una secular situación de abandono en los últimos años, al tiempo que se ha continuado con el acondicionamiento de cortafuegos dentro de los fines preventivos de conservación de la masa forestal.
Otras actuaciones positivas, de las que nos hemos congratulado este año, han venido de manos del SEPRONA, como ha sido la desarticulación de un taller ilegal de taxidermia en Baza, a través del cual se estaba contribuyendo a las ilícitas prácticas de caza y muerte de animales protegidos con el fin de disecarlos para su exhibición, o como han sido detenidos en el territorio del Parque algunas personas que practicaba de modo ilícito la caza, lo que pone de manifiesto que el control y vigilancia se ha aumentado en el territorio y está dando sus frutos.
Y cerramos el año con una buena noticia, como ha sido la localización en este año 2009 de la endémica mariposa Apolo (
Parnassius apolo ssp. filabricus), especie de la que no se detectaban ejemplares en la Sierra de Baza desde 1993, temiéndose que se hubiera podido producir la extinción del insecto, lo que nos pone de manifiesto la alta biodiversidad de este terriotorio y su singularidad botánica y faunística, tantas veces destacada desde las páginas de nuestra revista digital.